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Cenizas

El prado de Proserpina




Y todo sigue su camino, todo…

Siguen indiferentes los sucesos, 
ajenos y ausentes 
de cada uno de los miedos,
 y los extraviados deseos
de la gente.

 Poseer podré mi destino 
ya que dirigir el presente no he podido, 
quizá el mañana yo consiga seducir,
 o pueda el pasado adoptar como a un hijo.

Jaroslaw Datta


E indiferente el mundo rueda y rueda, 
se pasea soberbio por mi ventana blanca,
 sostiene su reloj de arena como lengua grosera
 y amenaza mis ilusiones con su sudario, 
blanco y con la postrera mañana a su vera …

¿Quien te has creído, vida,
 acaso crees que podrás conmigo,
 con mis cenizas? 

Quien te crees para pasar sin mirar 
y sin tocar mi virgen puerta, 
para la luz tamizar 
cuando se acerca a mi ventana
 cada noche, si la luna llena llama, 
y cada mañana si el alba fuera?

¿Quien me crees 
que no salga a buscarte,
 qué piedra, qué mueble,
 qué desgana…?

Si acercárase alguna vez la luna
 a mi casa,
 besaríala yo con mis ojos,
 con mis sueños, 
con mis garras…

Si acercárase el viento lo bebiera,
 la luz,  en ella me prendiera, 
el amor, con él trenzaría mis frutos,
contigo mis ganas…

Un viaje, 
cien caminos,
 una opción, 
 noventa y nueve 
desperdiciadas…

Y volar podré porque volar he podido, 
y fuera del juego me elevaré 
cuando mis alas quebradas
 no levanten más mis pies del camino,
 porque tu recuerdo amansaré 
para que acune mis cenizas con tus cenizas
 en el aire del perfumado olvido.

Me pregunto...

Esse Imaginaria






Me pregunto tantas cosas...

Qué busca el ocaso tras el velo del día, 
qué busca...?

Y qué busca una y otra vez tras el poema del día,
 tras los versos de los besos,
 tras los de las sonrisas?

Me pregunto porque no sé, 
qué busca el niño en el infinito azul del cielo,
 qué la luna, qué los ojos amantes 
en los amantes versos están buscando?

Una recompensa por sus pensamientos,
un reino daría sin tenerlo...



Agniezska Lorek



Lo dibujaría sobre un papel en blanco,
 en ese y en este mismo que insistente
 pregunta qué busco al rasgarlo.

Entregaría ese reino
 por saber qué impulsa al agua negra del lago
 a mutarse en un vergel de estrellas juguetonas
 y luna de amor robado.

Reinaré sobre mi reino
 de castillos de ladrillos coloreados,
 de unicornios imberbes e inocentes,
 de amapolas que no saben
 que al mismo sol su rubor robaron...

Y lo entregaría luego sin dudar,
 por saber qué mueve y mueve al cíclico día
 a incendiar noche tras noche el cielo claro, 
enterrando mis sueños ingrávidos
 en frío y negro barro.


Noten

El prado de Proserpina






Mejor no esperar, no esperar nada...

Mejor tomar,
 tomar el sol a sorbos, 
el viento tomar con sed insaciable 
y en copa de tallado cristal.
La piel amante gozar como cereza brillante,
 el alma y el cuerpo abrazar,
 la una intangible y tan cerca,
y el otro tangente,
 secante y tan distante...

Flores que no permanecen 
y en volandas se deshojan 
en pos de postergados amores...
 Aguas tranquilas que guardan
 la esencia misma del misterio, 
indecisos pajarillos de inocencia...
 Sombras de estío, acogedoras,
 del invierno húmedas prisiones,
 todos noten, todos oigan, 
que vivir es un sólo trago 
para tomar en copa alta y frágil,
 sujeto al tiempo con labios prietos
 y temblorosas manos...

La muerte

El prado de Proserpina


Recuerdo
 cuando estabas, 
y cuando eras...

Entonces el mundo estaba completo. 

Tú, con tus manías cubrías todos sus huecos, 
con tus palabras sabias, con tus mohínes tan graciosos, con tus pobladas cejas.


Expografía.com


Y aquel día recuerdo, 
recuerdo aquella noche, 
tan tensa, tan negra...

Todo lo presagiaba,
 nada lo detuvo. 
La Parca afiló 
en nuestras mismas faces su dentada guadaña.
 La vimos, sí, tú y yo la vimos
 ¿Recuerdas?

Habría de pasar, se sabía. 
Estaba en el aire, se masticaba al hablar,
 se respiraba y dolía, lo espesaba
 como un gel frío de espanto
 que intentamos templar una y otra vez, 
una y otra vez... 
¿Verdad que te acuerdas? 

Pero todo fue inútil. 
Creíamos que pasaría de largo, 
miramos hacia otro lado, 
un momento, sólo un minuto, el cansancio...
 y nos dormimos. 

Tus ojos amanecieron como el cristal,
 tu reloj y tus zapatos, tu ropa, 
todo en orden marcial... y tu vida, 
tu vida la bruja parca,
 la traidora agazapada, 
la insistente cobarde la había raptado
 en un segundo, 
en la oscuridad de la noche, 
sin ser vista ni notada...

Sólo tú la viste en ese mismo instante, 
y su reflejo quedó plasmado
en las puertas de los armarios, 
en los cristales de las ventanas
 tras tus párpados fríos. 
Yo los cerré con mis manos.
 Último intento de sentirte, 
de notarte, un adiós inconfesable,
 un silencio y una pregunta postrera
 con olor de manzanilla y limón,
 olor a mañana vacía, soleada, hueca 
y sin puntos cardinales...

Te echo de menos. 
Cometimos muchos errores 
¿Acaso hay alguien perfecto?
¿Acaso eso me calme?

Estuviste frente a mi como un norte,
 alto y fuerte, bueno y blanco,
 estuviste y ya no estás, 
mi luz del día, ya no estás...

Te quise, te quiero, te querré... 
No me importa que ya no estés,
 te querré igual, no más, 
te querré igual.

Te tengo en mi pecho 
clavado como un estoque, 
este es tu lugar.

 Te cuidé, me cuidaste,
 te alimenté, me diste de comer, 
te obedecí, te obedecí... 
Me enseñaste a leer y a escribir,
 a reír, me enseñaste mil poemas,
 me enseñaste a no mentir
a no olvidar.


Klara Erzsebet Bujtor


Y yo no te voy a olvidar, 
aunque tu cuerpo te haya olvidado,
 aunque tus cenizas sobrevolaran la sierra, 
aunque el mismo mundo se extinguiera.
 Tú eres yo, y yo misma sobreviviré al mundo
 para sostener tu memoria
 y contener tu ausencia.

Colgada del cielo

El prado de Proserpina



Incertidumbre, 
camino partido, camino robado...
Meta en el cielo, 
destino olvidado...


http://tophinhanhdep.net/44-hinh-anh-girl-buon-anh.html




No sé qué hacer si no me acompañas, 
no sé qué debo hacer si no me nombras,
 tú que diriges los sueños, 
olvidaste el mío que no tiene sombra.

¿Qué he de hacer en la soledad de la noche 
si no discurres mis paisajes?
 ¿Qué he de hacer si no te paseas por mis sueños, 
si ya no amainas mis pesares?

Qué, luna redonda, 
burbuja bella del silencio...
 ¿qué será del principio y del fin
 si no puedo alzar el pensamiento
 y verte a ti existir, 
colgadita del cielo...?



Al sur del sur

Esse Imaginaria




Calienta el sol, 
calienta el cielo.

 Templa el son, 
tiembla el sueño.

 Surge el verso, 
dulce surge,
 viene desde el sur de puntillas
 y en silencio...

Quieta la calima, se extiende lasciva por los sueños y embriaga el alma de esa guitarra, poseyendo todos los besos de los amantes más ebrios...
Y a la sombra del sur,
 el zumo de ese alma se esconde
 en el suelo de un patio
 regado de azahares borrachos de pecados,
 a media noche...



George Owen


Llevo tus colores en la cara, 
no llevo otros. 
Llevo tus rasgos, tus defectos, 
tus recuerdos y mil espadas, 
dibujandos en mi piel tus peleas y tus besos, 
tus ilusiones castradas, tus triunfos
 y cada surco de tus lágrimas.

 Eres mi sol y mi desierto,
 mi sentir y mi desprecio, 
tus te quieros, mis silencios, 
tu eres más y mucho menos.


Luna

Esse Imaginaria




Nada me queda
 sino el nacarado susurro 
de la siempre nombrada.

Idrassi Soufiane

 Nada me queda 
en medio de la densa oscuridad 
libre y forzada...

 Nada me resta 
tras el apabullo del intangible día,
 nada necesito... 

sino el baño fresco de su luz 
tan tenue y tan callada... 

sino el canto sobrenatural de su esfera 
sobre el viento de las eras, 
y su discurrir cíclico y mágico
 sobre las nubes de tu espera...


Quiero quererte

Esse Imaginaria



Quiero leerte un verso
 a viva voz,
 como un te quiero,
 como un beso...


Gabriel Moreno Nogal


Quiero escribirte,
y dibujarte quiero, 
contornear tu sombra callada y triste,
 saborear tu alma noble, 
quiero mimarte...

Quisiera volar sobre tus altos sueños 
cazarlos uno a uno con mi arco,
 atravesarlos de una mirada primero, 
y vencidos, rendidos y dóciles,
 entregártelos luego.

 Y quisiera encontrar 
tus puntiagudas penas, 
engarzadas en las esquinas cóncavas 
de tu entregado duermevela, 
diluirlas poco a poco y con paciencia 
en blanca sal azucarada y canela. 

Bucear tus miedos quiero,
 hondos y negros, escondidos, 
nunca hallados,
 y ninguneados como insectos... 

Saberlos y conocerte y conocerme, 
bordarte un sudario de placeres
y de vainicas un rosario; 
Quisiera cantarte 
la serenata silenciosa de mis besos,
y bajito y claro,
 como la luna sobre el sembrado,
 quiero quererte
como a un jilguero...

Me reinventas...

Esse Imaginaria



Se acerca pensativa el alba,
asoma su secreto futuro por mi ventana,
 llamando a las luces dormidas de mi alma
con su sorpresa eterna,
y su futuro colmado de mañanas.

BeautifulBurden
© Jennifer Healy


Se acerca llamando fuerte
 a las puertas de mis párpados pesados y sin ganas...
No me necesitas, amanecer dorado,
pero requieres mis ojos torpes
 para verter sobre ellos los vírgenes brotes
 de tus recién nacidos rayos
de cálido oro 
y frío nácar.

Y me inventas y te reinventas,
ciclo a ciclo redibujado...
Y cada día llamas a mis puertas
 con tu sin fin dorado,
con tus reflejos amarillos,
 con tu mar enamorado,
 y tus nubes rosas y azules
que prenden en llamas
las mojadas almohadas del pasado.

Luna afrutada

Esse Imaginaria


Viene la luna, 
alta y redonda, 
a traer a mi ventana
 tus ojos ausentes, 
tus manos blancas.


Amandine Van-Ray



 Viene la luna, 
subida a los cielos rasos, 
viene cargada de sueños nuevos
  de viejos milagros.

 Con tus ojos me mira,
 con tu voz me habla,
 no importan las ausencias sin vida, 
colgada a su esfera,
 burbuja de plata... 

No hay distancias, 
la reina del cielo las rompe, 
serena, móvil e inmóvil, 
meiga que aniquila el tiempo, 
el olvido y los rencores.

Vino esta noche
 con su vestido ámbar, 
dulce y amarga, 
perfecta bailarina del silencio y del tiempo,
 sultana callada de dulzura afrutada 
y secretos amores.

Trae para mi su alforja de sueños, reconfortantes caricias invisibles que tras mis párpados inventan el cielo. Y baja poco a poco y suavemente su esfera mágica sobre las mágicas aguas, y se refleja y me seduce como bruja dorada, corazón de plata...Y al fin besa el mar en un beso infinito de trascendente paz, y se hace el alba, vástago cíclico y por siempre recién nacido de su mágica coreografía de cristal.

Los perros

Esse Imaginaria



Del recuerdo, señor, de aquel verde
nace el suspiro de amor y amarillo,
que en la distancia es cálido y sencillo
 tal rostro que de antaño vino a verme.

Aquel prado, ya conmigo por siempre
con sus miles de flores, con su trigo,
sus perros rabiosos en el cortijo,
el padre bueno, y mi miedo imberbe.

En la lejanía, nubes bajas,
 y perros rabiosos que las muerden
bebiendo el dulce agua que de ellas mana.

Aullando tras las espigas altas
perros negros se acercan como gente,
esos perros que en mis sueños duermen.




Idrassi Soufiane


Y duermen agazapados, 
con un ojo abierto y el otro cerrado,
 espiando mis movimientos 
entre las espigas del trigo,
 los perros invisibles y negros
 como grajos... 

Y como gente, 
acechan para traer mi perdición
 con uñas y con dientes.

 Como gente, 
persiguen mis soledades, 
como gente que atisba mis lejanías,
 mis pasados y mis presentes...

 Veloces y negros, 
los insistentes perros 
 galopan agazapados en la franja estrecha
 que hay entre las nubes bajas y negras
 y las margaritas indecisas y contrahechas 
 que asustadas no los detienen. 

¡Corre, corre, 
corre a casa, corre lejos!

Pero el campo verde 
se nubla y es inmenso, 
y los alientos caninos
 ya mojan mis sienes.

Y atrás miro sin respiración, 
ahí están, corren, vuelan,
 pierdo el equilibrio y
ahora se ven tan altos...

Acercan sus muecas delgadas, 
siempre en manadas negras y densas...

Me levanto con la esperanza extinguida
 y erguida los veo llegar 
y cobardes como gente se agazapan
 presas del miedo...

Temen los demonios al cordero,
 ahora temen si los miro, 
temen si los nombro
 y uno por uno
  mastica el depredador
 el miedo manso del cordero...

El amor

Esse Imaginaria

Amor, la palabra que no es palabra...

La más vendida...
la más comprada, 
la más mentida y aunque 
 verdadera o falsa,
incombustible consumada...


Matías Sterner


Amor en el viento hay
 y en el llanto.
 Amor en los ojos 
y en las manos. 
Amor en los burdeles,
 traicionado...
 En las manos de la madre es 
y aún en las del hijo abandonado...

Dios del hombre, 
y del mismo hombre diablo...

Amor perdido, 
amor buscado, 
inventado, mal dibujado,
 y detestado...

Y los poetas... 
los poetas riman besos sin cesar... 

Riman sueños, besan cielos, 
abrazan silencios que rezan letanías 
de amores de mil colores 
sin solución de continuidad,
curtidos de cien sabores
 y sinsabores.

Pero siempre fueron los cariños pequeñitos los más claros, 
mientras que en las cavernas más oscuras reptan húmedos y lentos los amores que enlazan los cuerpos,
 los de todos soñados.

Amor, 
el que se encuentra sin haber buscado, 
que se pierde si perseguido, 
tal colibrí de capricho encaprichado
que cultiva el candor.


Ksenia Muza



 Dulce hiel,
 escasa ambrosía,
 ego entregado
ser del revés.



Escribiendo...

Esse Imaginaria



Necesito un lugar oscuro para entender la luz; un papel en blanco para comprender las palabras, tu mirada para deleitarme en tu ausencia y tu ausencia sin sombra necesito para conocer tu ser tal como se conoce la vida sobre el revoloteo de unos pájaros en la mañana, tal como se aprecia la muerte cuando es cálida y necesaria...


A. M. Lorek

Y ese papel cuando está vacío se me ofrece como un vergel fresco y verde, repleto de flores blancas y animalillos que corretean sin orden aparente, inmersos en la absoluta armonía del caos que me reclama. 

Un sueño... Cuando despierte de este sueño quizá haya algo, quizá no haya nada... ¿Cuando despierte es posible que exista algo de lo que he soñado??
Paso la vida durmiendo y escribiendo sobre las nubes... Al fin mi existir es realmente un sueño, coronado de una alta luna, coronado de estrellas, tangente de los cantares limpios de la fuente clara que para mi sola entona cercanas, inquietantes y hermosas serenatas nocturnas que alumbran el camino de mis zigzagueantes  ilusiones casi, casi abandonadas.
A veces, subida en alguna de estas oníricas ilusiones creo estar viva, ¡y sé que lo estoy...!!! pero pronto tomo conciencia de mi inconsciencia y de la inconsistencia de tales espejismos; entonces es cuando la luna me mira como de soslayo, entre burlona y confidente, y se ríe con su sonrisa inclinada sobre el azul oscuro casi negro del anverso de mis párpados nublados e inquietos.

Al fin la vida para mi es un sueño encadenado a otros sueños más pequeños, una sucesión de intentos y de esperanzas, de fuerzas sobrehumanas empleadas en encender las ascuas agonizantes de mis deseos. Al fin pasaré la vida en cualquier lecho de flores secas, soñando un mundo casi real, dibujando en mis lienzos rostros casi vivos que gesticulan intrincadas emociones, como un gepetto.


Muros de arena...

Esse Imaginaria



Como un diablo me hablas,
 como el leviatán y su cercano eco, 
y como a la maldad misma atiendo
a tu boca osada, serpiente de plata. 


Yeny K.




Como el ocaso oscuro, sigiloso marchas,
 entre los rojos lamentos del día herido de muerte, 
despedida eterna, tal ocaso el adiós mismo muerdes 
y mi anochecer de azahar, injusto raptas.

Y regresas, samael, 
como el reincidente deseo regresa una vez colmado,
 cargado de rabia por la contemplación
 de la honesta ignorancia del mundo
 desconociendo tu corazón impuro y desechado.

Mas yo te acojo, mi amado bael,
 y beso tus ojos profundos y oscuros
 con los labios de mirada arriesgada
 despeñada en los tuyos... 

Sé que en tus brazos estoy segura,
 ya sólo las ascuas del averno me deslumbran,
 porque derruir no sabes mis muros de arena,
 cal y arcilla muda.

Guerra en tus pupilas, 
contienda en tu mirada, 
la sangre pugna en tus venas 
por ver la del mundo entera
 derramada... 

Mi astarot incauto, 
de nuevo hoy yerras; 
engendro inmundo y bello, 
hoy amas. 
No hubo noche sin su alba bella,
 ni existe guerra sin baldía derrota, 
cansada y lenta.

La pereza

Esse Imaginaria


¿Qué será de los amaneceres 
cuando no pueda verlos...?? 
Sin mis ojos escrutadores y tercos,
 sin mis sueños volátiles
 sobre sus brumas bellas pasajeros...
y sin mis lágrimas que sin límite son, 
los caprichosos crisoles que estorbando
 me devuelven al ras del sueño???

Miho Hirano

¿Acaso ellos me echen de menos, 
tan grandes e imperturbables, 
tan perturbadores y eternos...???

Una mirada más, un sueño menos, 
un despertar al alba que se retrasa, 
un ángel que trasnocha 
 en lo  profundo del plácido suelo...

 Acaso por ni nombre me llame, 
acaso ya no me recuerde, 
haciendo y deshaciendo mil cosquillas 
bajo los brazos abiertos de los horizontes...

No, los amaneceres no tienen memoria, 
sólo nacen y nacen y siguen naciendo,
 sin reparar en los pájaros ni en sus vuelos
 y sin notar el insistente retraso
 de los perezosos dormilones 
que entre sus lisas sábanas
 atrapa el sueño...

El olivo y la fuente

Esse Imaginaria







Esta noche las estrellas se precipitan 
en loca carrera sobre tus aguas,
 mágica fuente de piedra,
 embrujada y encaprichada  
del eco rotundo sobre la yedra.

 Y es la fuente 
a la sombra del olivo centenario 
 que por siempre y siempre vela, 
y que amorosamente reflejado 
sus aguas frescas y verdes
 en la frente besa...

Esta noche el cielo se oscurece y mece 
todas sus luces pequeñitas que se esconden,
 y bajo la seda de las aguas de tranquilos sones,  
entretenidas nadan y bucean como peces.

Y esta noche las estrellas de la fuente
titilando gustan de jugar con las hojas
 y los frutos jugosos que precipitados  
desde el enamorado olivo se presten. 

Noche verde, 
luna ambar,
 agua clara, 
olivo y fuente...





La palabra

Esse Imaginaria



Paseaba la oscura realidad 
los prosaicos pasillos de mi alma,
 lamiendo sus paredes.

 Paseaba la obtusa verdad 
los ciclos finitos de la vida,
 que burlona se asoma 
 al precipicio de la partida 
y la muerte. 

Y paseando fortuitamente y de repente,
 un reflejo casi transparente 
distrajo mi rutina apática y perezosa
 del gris oscuro proceder de mis pensamientos lentos,
 disponiendo lo qué sería si...


Agnieszka lorek

No siendo lo que soy, yo hubiera nacido palabra...
Quizá mejor me hubiera ido si en vez de alma y carne hubiera sido tinta malva, 
una tinta cualquiera tatuada sobre el dócil blanco, 
cualquier sucesión de signos hubiera sido buen destino, 
deseable... 

Paloma, nube, flor, hierba,  
risa, llanto, agua, nada...
 Melodía, beso, riña, incluso queja vana.
 Amor, cansancio, ilusión 
o un sueño cualquiera, pero insobornable...

Hubiera querido ser palabra si la palabra quisiera, 
aunque no me gustaría ser guerra.

No me importaría ser muerte, 
porque a su hora la muerte es tantas veces deseable, 
como el llanto y las lágrimas lo son,
 siempre tan injustamente temidas e indispensables...

Si el destino me dejase,
 quisiera transformarme en palabras
 tal que viento o tarde de verano; 
igual mañana clara o noche cerrada, 
pero nunca nunca querría ser palabra
 cuando la palabra mata.

Quisiera ser como ese azahar
 que nace temprano bajo el cielo azul 
de la primavera, aunque a la tarde
 bien temprano se desvanezca.

Quisiera ser querer, 
quisiera ser sierra, 
quisiera ser quisiera. 

Yo quisiera ser pasado 
pero nunca sería futuro
cuando es futuro olvidado.

Yo quiero ser el aire libre del olivar,  y el viento bajo las alas de un gorrión color gris amable, y quiero ser luna escondida tras la torre vieja.  El vuelo de la capa oscura quiero, o el fugaz recuerdo del anciano que en la comisura del entendimiento se rompe como el cristal. Yo prefiero ser libertad y agua de la fuente, y quiero ser palabra cuando tiene escondida mi pequeñita ilusión y despreocupada vuela. 

Lágrima seca

Esse Imaginaria




Ya no quiero ser nada,
 el futuro se ha acabado, 
consumidos todos los sueños
 en la comisura unos labios;
 en la fría sonrisa de la luna, tan inmensa... 
o en el monocorde tono de su serenata bella.

Agniezsca Lorek


Acaso quiero ser sombra,
 acaso suspiro cansado,
 podría incluso ser pétalo caído 
de alguna flor serena...

 Si algún dios me mirase, 
podría ser ese recuerdo borrado
 sobre una lápida partida y negra, 
en medio del inmenso camposanto 
del olvido y la indiferencia...

Si pudiera elegir, elegiría
 ser viento poderoso 
sobre las caras de los ciegos
 cuando pasean. 

Quisiera ser la sombra lenta
 de un relámpago, 
el recuerdo de un beso 
sobre los labios castos, 
aquel llanto consolado
 o esta lágrima seca.

Ojos leves

Esse Imaginaria




El retrato de una soledad
en tus ojos entornados y  leves se pincela, 
ensimismados, secuestrados, acorazados, 
expuestos al frío y a la intemperie...

 Pocos años, mucho temes, 
tu poca vida, mucho hiere..
No temas, niño, no temas, muerde, 
no temas al miedo ni al fracaso 
que son afilados y duros tus dientes. 


yana shmaylova


Roza el halo de la luna con tus sueños
 suaves y de nieve, 
arrastra el vientre sin miedo
 sobre el suelo empedrado que no te detiene... 

Dura lid, dura la almohada, 
afilados los besos falsos de esas muchas gentes,
 pero no olvides, niño, no olvides
 que el sol sale cada mañana limpiando las pasadas hieles,
 que alumbrando sale el sol los caminos, 
templando las temblorosas pieles.

 No olvides, mi vida, no olvides nunca, 
que es cálido el abrazo del amigo entregado 
y dulce la sonrisa del que te quiere.

No temas al sol ni a la luna, 
no al enemigo sincero ni al amigo falso, 
no temas el dolor, brujo agudo que siempre pasa,
 ni del hipócrita el vil engaño.
 No temas, porque el sol sale cada mañana
 fiel sobre las legiones de insistentes nubes negras, 
y templa tu sonrisa, mi niño, 
templa tu mirada con fuerza, 
y cómete el mundo con tu hambre,
 que tuya es la vida entera.