Lo que uno es





Nada más caer desde el cielo 
o desde lo más profundo de la tierra emerger; 
nada más abrir los ojos, 
y al punto mismo de aspirar el aroma 
de los primeros y oblicuos rayos, 
descubrí que sólo hay
 el brillo de la soledad
 pegada a la piel.

Sola para nacer, sola para lidiar, sola para soñar y hasta para el mismo sueño perder...


Agniezska Lorek

Y no es magma ceniciento la soledad, ni es mala, ni cruel, no es bruja terrible, ni agujero inmundo; tampoco es error profundo ni futuro que me haga enrojecer; pues cuna es del conocimiento y del productivo deambular del ser, amiga que fermenta la serena alegría y que acuna el arte manso de darse sin pedir nada a cambio y sin exigir de nadie lo que se dé... Pues solo se nace y solo se ha de partir por la pendiente más acusada que se enfrenta al perecer; y mientras tanto tan sólo se puede dar lo que uno es.