Esse Imaginaria
Un instante...
la vida es un instante,
la vida es un instante,
es un segundo...
Una caricia, un brillo sobre unos ojos en la noche,
un susurro...
Es el roce de tus cabellos sobre los míos,
tan profundo...
El calor de tu mano junto a la mía...
Un guiño de aire,
La vida entera cabe en un frasco diminuto una vez vivida. Todo se resuelve en volver la vista atrás para ver en un reflejo lo que quedó clavado en el corazón, ese que ya sin prisas se detiene para no latir más...en un segundo..
Raudos y maleducados, los instantes pasan sin avisarse y sin despedidas, pasan sobre sus nubes sin halos, igual que sobre los afilados acantilados pasan los intrépidos vientos suicidas..Y los trozos de vidas se abrazan a pedazos de muertes anunciadas y se abrazan a esos trocitos de risas que se disuelven en el aire, apenas trenzadas..
Yo quiero un reloj que marque tranquilas las horas llenas de risas que afloran de los alientos dulces y las dulces albas, quiero un reloj que amase pavores en cajitas pequeñas y cerradas, que las arroje bien lejos y borre con un paño suave sus sombras lejanas.. y quiero también que deshaga los tormentos eternos de las miradas amargas..
Quiero una copa pequeñita y dorada para guardar mis tres o cuatro mil risas, mis mil quinientas miradas alzadas; quiero una copita pequeña, apenas nada.. que guarde mis riñas bonitas, esas que cerraron con besos
mis lágrimas..
Raudos y maleducados, los instantes pasan sin avisarse y sin despedidas, pasan sobre sus nubes sin halos, igual que sobre los afilados acantilados pasan los intrépidos vientos suicidas..Y los trozos de vidas se abrazan a pedazos de muertes anunciadas y se abrazan a esos trocitos de risas que se disuelven en el aire, apenas trenzadas..
Yo quiero un reloj que marque tranquilas las horas llenas de risas que afloran de los alientos dulces y las dulces albas, quiero un reloj que amase pavores en cajitas pequeñas y cerradas, que las arroje bien lejos y borre con un paño suave sus sombras lejanas.. y quiero también que deshaga los tormentos eternos de las miradas amargas..
Quiero una copa pequeñita y dorada para guardar mis tres o cuatro mil risas, mis mil quinientas miradas alzadas; quiero una copita pequeña, apenas nada.. que guarde mis riñas bonitas, esas que cerraron con besos
mis lágrimas..
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